Secadoras de condensación

Una secadora de condensación es aquella que toma aire del exterior y lo calienta nmediante una resistencia eléctrica para conseguir que tu ropa siempre esté lista y preparada en el armario.

La gran ventaja de este tipo de secadoras es su velocidad en el ciclo, ya que al contar con una resistencia, la temperatura alcanzada es mayor que con otros tipos de tecnología y por tanto, cuentan con programas muy rápidos. Además, estos resultados se logran también garantizando una protección de las prendas y tejidos óptima.

El funcionamiento de las secadoras de condensación es muy sencillo, ya que calientan el aire con resistencias eléctricas que posteriormente, pasa al tambor para secar la ropa. Para extraer la humedad de las prendas, el aire pasa por el condensador donde el vapor de agua pasa a estado líquido y posteriormente se lleva al cajetín o al desagüe.

Es importante saber que podemos conectar estas secadoras directamente a la toma de desagüe, haciendo que nos olvidemos del vaciado del cajetín tras los ciclos de lavado.

Las secadoras para ser eficientes en tiempo y consumo cuentan con una tecnología clave: “AutoDry”. Se trata de unos sensores que miden el grado de humedad de las prendas. En función de ello detectan cuando la colada está seca y ordenan finalizar el programa. De esta forma se evita someter a las prendas a temperaturas innecesarias, y por tanto, un menor consumo de energía. Hay tres grados:

• Seco fácil plancha: es decir, queda cierto grado de humedad en las prendas en las prendas para facilitar un posterior planchado y eliminación de arrugas.
• Seco para guardar: para prendas no muy gruesas y quedan perfectamente secas.
• Seco para guardar +: recomendado para prendas con varias capas y gruesas, asegurando que todas ellas quedan secas.

Puedes conseguir repuestos originales y accesorios para secadoras por condensación y para modelos con tecnologías diferentes.